Buscar este blog

Mostrando entradas con la etiqueta Latinoamérica Unida por el Agua. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Latinoamérica Unida por el Agua. Mostrar todas las entradas

lunes, 20 de marzo de 2023

Jornada por la naturaleza: Latinoamérica Unida por el Agua

@vigilantecosta

En un esfuerzo inédito sin precedentes, distintas organizaciones Waterkeeper de América Latina se reunieron y organizaron para conmemorar el Dia Mundial del Agua (22 marzo). Colombia, México, Guatemala, Perú, Ecuador, República Dominicana y Chile, participaron de la Campaña (Minga) simultánea de limpieza y Restauración de sus ecosistemas locales.

Latinoamérica Unida por el Agua es una iniciativa independiente, autónoma y tiene como objetivo principal la restauración ecológica y la educación ambiental, integrando a las comunidades como protagonistas de la conservación y defensa de sus recursos naturales que permita, en definitiva, conocerlos, vincularse con su entorno y amar esos lugares únicos para motivar y movilizar estrategias integrales que eviten contaminar ríos, fuentes de agua o ecosistemas frágiles.


Desde la organizaciones de base local y ciudadana estamos siempre dispuestos a compartir experiencias que nos permitan seguir creciendo y explorando alternativas que sumen a este tipo de actividades tan extraordinaria como es el disponer de un tiempo propio para limpiar lo de otros.
El desafío siguiente será reconvertir los desechos.


lunes, 26 de abril de 2021

La Corrupción: Tumor maligno de nuestra sociedad

@rodrigodelao | director @vigilantecosta waterkeepercl 

Próximamente, llegará a término mi segundo período consecutivo como representante latino en el Concejo de la Alianza Waterkeeper, el que cumplí desde 2015. Ha sido toda una aventura, un aprendizaje intenso, sobre la marcha, pero, que se ha hecho sinceramente. He intentado poder representarles en buena ley asumiendo el desafío y responsabilidad que ha implicado todo este proceso, a la confianza depositada en mi persona, y siempre esperanzado en que debemos mantener nuestra base de incidencia desde nuestro territorio y alianza.

Personalmente, un poco golpeado al observar o darme cuenta, en este tránsito, que la gran causa que debemos enfrentar y que abusa, afecta o impacta directamente nuestra naturaleza, al agua, a nuestros ríos, bosques, etc., de manera transversal, termina siendo el abuso, la corrupción instalada y, por ello, es que se han impulsado y se han hecho acciones conjuntas con nuestros programas hermanos miembros de la alianza, sobre el acuerdo de Escazú, su urgencia e importancia. Lamentando, por cierto, ausencia y renuencia de Chile por suscribirlo recordando que junto a Costa Rica fue uno de sus impulsores.

Y este abuso legalizado (mas no legítimo), instaurado en oscuros términos, consolidado por una mala clase política envanecida y deslegitimada por una ciudadanía que habita, agotada, un país perverso de colusiones, desfalcos, robos al erario nacional, financiamientos ilegales para cúpulas económico-políticas que lo han permitido, otorgandole a sus delitos penas de clases de ética como modelo de conducta y coronario de una burla sistémica que recluye e ignora, de manera morbosa y descarada, a los vulnerables, a los olvidados, en pro de quienes controlan, se benefician y reditúan de este reloj suizo de sistema cimentado en las AFP y los recursos naturales del país. Perfecto desde la óptica de su privilegio.

Ni siquiera sé si, a estas alturas, será válido preguntarse que es, cuál es el alma, la esencia del ser, de un trabajador con vocación de servicio público.

Después de varios años nuestra organización ha tenido yerros y aciertos. Triunfos ciudadanos que perduraran por siempre. Pero, también fracasos, frustraciones y derrotas de las cuales debemos aprender, y hemos aprendido, a recargarnos, reconstruyéndonos para recomenzar, conviniendo, que cualquier reto e intento en mejorar nuestras formas de vida valdrá la pena el intento. La perseverancia es una buena aliada para fortalecer y consolidar valores que contribuyan a buscar y aceptar buenas y mejores formas de vivir, principalmente, por la responsabilidad de entregar lugares habitables para las futuras generaciones. Pensar en justicia, implica pensar en ello. Simple y complejo. Paradójico. 

Defensores de los derechos de sus barrios, dirigentes sociales en sus pueblos o ciudades hoy debemos ser cautos, resguardarnos entre nosotros, ante la insanidad de ser amedrentados, amenazados, o eliminados; evidenciando la trama oscura que debemos enfrentar cuando se defienden derechos, muchas veces, de quienes no tienen voz o medios para hacerlo y terminan siendo subyugados o abusados. 

En eso, Waterkeeper ha sido y es vital; fundamental en la definición de lo que realmente es e implica una alianza global, y las maneras en que hemos colaborado, en la búsqueda de posicionar presencia y prestigio de nuestra red como organizaciones y personas dispuestas y convencidas de que la justicia social, ambiental y/o climática es un deber en su defensa y, un anhelo, en su derecho.

Mi país, Chile, vive un proceso inédito sin precedentes. Aun, y a pesar de que la pandemia ha sido un salvavidas para un gobierno que desde octubre de 2019 solo ha contribuido a su deblacle, subyace incólume la esperanza cuando un pueblo, no sus gobernantes, han impulsado el reescribir y legitimar nuestra propia constitución. La piedra angular, el consenso, en ese proceso de cambio en el que podremos redactar una carta magna de plataforma ambiental y/o ecológica donde podamos pensar en los derechos humanos y los de la naturaleza.

Justicia Ambiental y Climática. Cumbre Waterkeeper América Latina

Recientemente, a mediados de abril, terminamos nuestra Segunda Cumbre (la primera fue en Cartagena en 2019), reunión o encuentro de organizaciones latinoamericanas miembros de Waterkeeper Alliance en donde confluimos compañeros y compañeras desde Estados Unidos, México, Colombia; Costa Rica; Perú; Ecuador, Dominicana; Brasil; Chile. Impactados de como la pandemia nos ha golpeado a todos y también esperanzados en poder seguir accionando y trabajando una mirada conjunta en donde nuestra principal fortaleza es el que ya participamos de una red y un movimiento consolidado.

Uno de los conferencistas de nuestra reunión fue Jeff Tahler, abogado, quien se refirió a la Justicia Ambiental y Climática. Jeff, nos enseña cual es la definición de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) de Justicia Ambiental como “el trato justo y la participación significativa de todas las personas sin importar su raza, color, origen nacional o ingresos con respecto del desarrollo, implementación y cumplimiento de las leyes, regulaciones y políticas ambientales. Este objetivo se logrará cuando todos gocen del mismo grado de protección contra los peligros ambientales y de salud, y el mismo acceso al proceso de toma de decisiones a fin de tener un entorno saludable en el vivir, aprender y trabajar”. Añadiendo también que la Justicia Ambiental “exige el derecho a un uso ético, equilibrado y responsable de la tierra y los recursos renovables a favor de un planeta sostenible para los seres humanos y otros seres vivos”.

La Justicia Ambiental “exige el cese de la producción de todas las toxinas, desechos peligrosos y materiales radiactivos y que todos los productores pasados y actuales sean expresamente responsables ante la gente por la desintoxicación y la contención en el punto de producción”.

La Justicia Ambiental “exige el derecho a participar como socios igualitarios en todos los niveles de la toma de decisiones, incluidos en la evaluación de necesidades, la planificación, la aplicación, el cumplimiento y la evaluación”.

En relación a la definición para Justicia Climática, se refiere, a “el cambio climático que afecta con más fuerza a los hogares, comunidades y sociedades más vulnerables ecológicamente y que también carecen de la capacidad político-económica para hacerles frente y adaptarse al mismo”.

La Justicia Climática “insiste en una transición desde el discurso sobres los gases de efecto invernadero (GEI) y el derretimiento de los casquetes polares a un movimiento de derechos civiles con las personas y comunidades más vulnerables a los impactos del cambio climático que las aquejan…”.

El Caso Urgenda (Países Bajos) es emblemático. En el Artículo 2 de la Convención Europea de Derechos Humanos (European Convention on Human Rights, ECHR) “protege el derecho a la vida” y significa que una nación tiene la “obligación positiva de tomar todas las medidas adecuadas para salvaguardar la vida de quienes se encuentran dentro de su jurisdicción”.

El Artículo 8 “protege el derecho al respeto de la vida privada y familiar”, que incluye la “obligación positiva de una nación de tomar medidas razonables y apropiadas para proteger a las personas contra daños graves a su medioambiente”.

La ciencia del cambio climático, en palabras del Tribunal, obliga a la conclusión de que existe una “amenaza genuina de un cambio climático peligroso” y que “la vida y el bienestar de los residentes Holandeses podrían verse seriamente comprometidos”.

Además, “existe un alto grado de consenso internacional” sobre la necesidad de lograr al menos una reducción del 25% de las emisiones de GEI para 2020 a fin de prevenir un cambio climático peligroso. El gobierno violó sus deberes según ECHR con un objetivo a corto plazo menos ambicioso, sostuvo el tribunal.

Waterkeeper, debe ser un escudo protector para sus miembros y de cualquiera que persiga mismos principios u objetivos, en pro de esa Justicia, de manera transversal y eso, ese proceso, se ha ido consolidando y se agradece. En nuestra región la situación es brava y necesitamos abordarlo de manera conjunta, estratégicamente, evitando sobreexponernos, o que nos amedrenten, nos amenacen y/o nos sigan matando. 

Termino pensando en mi experiencia como keeper, en estos más de diez años, en la representación regional ante el concejo y en nuestro trabajo que va desde el activismo, la defensa, pudiendo incluso confrontar y debatir visiones a través de la organización local, civil o ciudadana. Buscando siempre la convergencia, potenciando, en lo más posible, nuestro rol como Waterkeeper y la responsabilidad que implica, desde lo local, como un individuo parte de mi comunidad, hasta las alianzas nacionales e internacionales, como la nuestra. Eso se construye, a través del empoderamiento, de la educación e información abierta, que contriubya a la cohesión del tejido social, desde y junto a las bases.

Agradezco en trabajo de todos y todas. Lo mejor para mi compañero y amigo Patricio Chambers, como miembro del Concejo, quien ha sido un aporte en el ordenamiento, planificación y proyección en todo este proceso. 

martes, 22 de septiembre de 2020

Waterkeeper Alliance insta a los líderes de América Latina y el Caribe a que ratifiquen el Acuerdo Regional que garantiza protección para defensores del ambiente

América Latina se ha convertido en el lugar más peligroso del mundo para los activistas ambientales

En respuesta al aumento de asesinatos de defensores del ambiente en América Latina, el Director Ejecutivo de Waterkeeper Alliance, Marc Yaggi, envió a principios de septiembre una carta (disponible en Inglés y Español) a los líderes de 12 naciones pidiéndoles que firmen y ratifiquen el Acuerdo de Escazú, el primer tratado sobre derechos humanos en asuntos ambientales en América Latina y el Caribe. Entre sus disposiciones (art. 9), se incluye la protección para los ciudadanos activistas que trabajan en la defensa del ambiente.
Según el informe más reciente de Global Witness, una autoridad internacional en materia de abusos de los derechos humanos relacionados con el medio ambiente, en 2019 se produjeron 212 asesinatos de activistas ambientales a nivel internacional, de los cuales casi el 70 por ciento se produjeron en América Latina. Colombia es la nación del mundo que más asesinatos ha sufrido; 64 defensores del ambiente fueron asesinados allí en 2019. Los asesinatos en Honduras aumentaron de 4 en 2018 a 14 en 2019, convirtiéndolo en el país más peligroso del mundo per cápita para los defensores del ambiente, informó Global Witness. 
“América Latina es un lugar de peligro crítico cuando se alza la voz por los derechos ambientales”, dijo Yaggi. ”Las voces de la comunidad son una parte importante del proceso para determinar si los riesgos ambientales de un proyecto son mayores que sus beneficios. Los ciudadanos nunca deberían temer a la violencia por hablar en nombre de su comunidad, sus recursos naturales y nuestro planeta; la protección de los miembros de la comunidad que se hacen oír es un derecho humano fundamental. Este Acuerdo tiene el potencial de proporcionar esa protección tanto en el Caribe como en América Latina”
Además de ofrecer protección a los defensores del ambiente, el Acuerdo de Escazú también concede derechos de acceso a la información sobre el ambiente, la participación pública en los procesos de toma de decisiones en materia de ambiente y el acceso a la justicia en asuntos ambientales, garantizando el derecho de toda persona a vivir en un medio ambiente sano y que los derechos reconocidos en el Acuerdo puedan ser ejercidos libremente.
“El Acuerdo de Escazú lleva a la escena internacional la importancia de que las decisiones económicas se guíen por consideraciones sociales y ambientales”, dijo el Prof. Sérgio Mattos-Fonseca, Director Ejecutivo de Guanabara Baykeeper-APREC Ecossistemas Costeiros. “Este es el trípode que subyace a la sostenibilidad de la vida humana en el planeta”.
Waterkeeper Alliance urge especialmente a los países de Chile, El Salvador, Trinidad y Tobago, Bahamas y Belice para que firmen el Acuerdo de Escazú, teniendo en cuenta que acorde con el artículo 21 del Acuerdo, el período para la firma del Acuerdo de Escazú vence el próximo 26 de septiembre del 2020.
De los 33 países de la región, 22 han firmado el Acuerdo de Escazú y sólo 9 lo han ratificado. Para que el Acuerdo de Escazú entre en vigor es necesario que lo ratifiquen un mínimo de 11 países, los países a los que Yaggi dirigió su carta aún no han ratificado el Acuerdo. 
Waterkeeper envió la carta a los Primeros Ministros de las Bahamas y Belice, y a los Presidentes de Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, la República Dominicana, El Salvador, Guatemala, México, Perú y Trinidad y Tabago, así como a los embajadores de los Estados Unidos de América de las 12 naciones. 
Al enviar la carta, el Sr. Yaggi actuó como portavoz de los grupos Waterkeeper locales en América Latina y el Caribe.
Esos grupos locales son: Waterkeepers Bahamas de las Bahamas; Placencia Lagoon Waterkeeper en Belice; Guanabara Baykeeper en Brasil; Futaleufú Riverkeeper y Maule Itata Coastkeeper en Chile; Bocas de Ceniza Waterkeeper, Cartagena Baykeeper, y Río Inírida Waterkeeper en Colombia; Nicoya Peninsula Waterkeeper en Costa Rica;  Río Ozama Waterkeeper en la República Dominicana; Jiquilisco Bay Waterkeeper en El Salvador; Rio Motagua Waterkeeper en Guatemala; Cabo Pulmo Coast Waterkeeper, La Paz Waterkeeper, Loreto Coastkeeper, Los Cabos Coastkeeper, San Quintin Bay Waterkeeper, y Tijuana Waterkeeper en México; Rio Mapacho Waterkeeper, Ramis Riverkeeper, Marañón Waterkeeper y Amazonas Perú Waterkeeper en Perú; y Gulf of Paria Waterkeeper en Trinidad y Tobago.
“La ratificación y entrada en vigor del Acuerdo de Escazú generaría la estructura legal y política necesaria para garantizar la creación de espacios de participación pública EFECTIVA en temas ambientales“, dijo Carolina Chavarría Pozuelo, Nicoya Peninsula Waterkeeper. “Como organización que trabaja diariamente velando por el respeto del medio ambiente, es crucial contar con este marco legal.“
Imagen destacada: La Cumbre Regional Latinoamericana, del 24 al 28 de abril de 2019 en Cartagena, Colombia, tuvo 37 participantes en representación de grupos Waterkeeper de Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, México, Panamá y Perú.

martes, 3 de octubre de 2017

Campaña Waterkeeper: Latinoamérica Unida por el Agua

En un esfuerzo inédito y sin precedentes, se reunieron voluntarios de las distintas organizaciones latinas que participan de la Alianza Internacional Waterkeeer (Waterkeeper Allianza. En 6 continentes y en 35 países donde defienden a sus comunidades) y afiliados en más de 300 Organizaciones Waterkeeper (Basinkeeper, Baykeeper, Bayoukeeper, Canalkeeper, Channelkeeper, Coastkeeper, Creekkeeper, Deltakeeper, Gulfkeeper, Inletkeeper, Lakekeeper, Riverkeeper, Shorekeeper, Soundkeeper, Waterkeeper) en donde existen amenazas y riesgos en el derecho humano de acceso y saneamiento al agua potable; desde los agentes contaminadores hasta los organismos gubernamentales que no responden. (1)
Barranquilla, Colombia
Desde la segunda quincena y hasta fines de septiembre diversas organizaciones miembros de la internacional Alianza Waterkeeper de distintos países de Latinoamérica lanzaron una convocatoria desde sus organizaciones, sus voluntarios y en sus comunidades cercanas, sumándose al tradicional evento anual de Ocean Conservancy, organización ambiental que suma miles de voluntarios, convirtiéndose en el llamado que mueve a más voluntarios en el planeta para la restauración de ecosistemas costeros y/o ribereños limpiando miles de kilómetros y retirando toneladas de desechos que día a día se acumulan o terminan en los océanos.
Cartagena Baykeeper, Colombia
Un caso digno de destacar es el del sector de Tijuana, México, donde la campaña "Salvemos la Playa" y la organización local Tijuana Coastkeeper, reunió a más de 2 mil participantes retirando más de 9 toneladas de desechos. 
Las campañas de Waterkeeper Alliance unen el trabajo de las organizaciones de Waterkeeper en todo el mundo para contribuir en el alejamiento de nuestra dependencia a los combustibles fósiles, eliminar los impactos de las granjas industriales en las vías fluviales, proteger y restaurar las cuencas hidrográficas y ayudar a crear y hacer cumplir las leyes ambientales divulgando violaciones e infractores. (*1)
Chagres River Waterkeeper, Panamá
México, Costa Rica, Colombia, Perú, Chile, Ecuador estuvieron presentes en distintos lugares bajo el llamado de campaña “Latinoamérica Unida por el Agua”, a través de la acción directa, en conjunto con sus comunidades, comercio y autoridades locales, entregando un llamado de atención respecto de la contaminación que poseen, playas, ríos, estuarios, humedales los que terminan contaminando nuestras aguas y medio ambiente.
Cabo Pulmo Waterkeeper, México
“Es todo un desafío permanente poder converger y, desde las organizaciones independientes, hacer un acto de reflexión respecto del exceso de consumo de materiales desechables que son difíciles de degradar naturalmente”, nos comenta Rodrigo de la O, Maule Itata Coastkeeper en Chile y representante latino en el Concejo de la Alianza Waterkeeer y uno de los coordinadores del evento, señalando que “lo que más encontramos son colillas y desechos de plástico que por erosión o degradación se van minimizando haciendo muy difícil su detección entrando en la cadena trófica. A través de estas acciones, de la participación de este tipo de evento o actividades logramos sacar mucha basura y, al mismo tiempo, entregamos un mensaje crítico respecto de las propias conductas cuando usamos o visitamos espacios públicos y comprender los tipos de contaminación que reciben nuestras aguas. Desde ahí, pueden surgir formas o propuestas que permitan mitigar estas problemáticas que terminan muchas veces asumiendo las comunidades o ciudades costeras”, señala el impulsor de la Campaña Unidos por Aguas Limpias de Chile que se reedita en el mes de marzo de cada año conmemorando el día mundial del Agua.
Río Mapacho Waterkeeper, Perú
(*1) Wikipedia