Fuente: @puranoticia
Un estudio del Observatorio de la Costa UC indicó que los balnearios en Chile están duplicando sus niveles de erosión, con tasas de retroceso que superan los 5 metros por año.
A raíz de las intensas precipitaciones que se han dejado sentir con fuerza durante las últimas semanas, varias han sido las imágenes que dan cuenta de los daños generados en entornos naturales como por ejemplo en el sector de las dunas, entre Reñaca y Concón, donde se produjo un nuevo socavón en una zona residencial.
Las playas de la región de Valparaíso no han sido la excepción, pues también han resultado afectadas por las lluvias y marejadas, lo que se suma a un proceso de erosión que –según advierte el Observatorio de la Costa UC– las ha hecho retroceder, pues no son pocas las que están perdiendo su franja arenosa por diversos motivos.
En estricto rigor, el organismo indicó que los balnearios en Chile están duplicando sus niveles de erosión, con tasas de retroceso que superan los 5 metros por año. Es más, se afirma que el 86% presenta retrocesos preocupantes y que incluso 10 de ellas podrían desaparecer a nivel país, siete de las cuales se ubican en la Región de Valparaíso.
Cabe hacer presente que el estudio fue liderado por la académica del Instituto de Geografía UC, Carolina Martínez, en colaboración con investigadores del Centro UC Observatorio de la Costa, el cual destaca la preocupante aceleración de la erosión en playas a lo largo de Chile. El análisis abarcó 66 playas desde Arica hasta Chiloé, revelando un deterioro significativo en algunas áreas costeras en tan solo un año.
Una de las playas más afectadas por la erosión es Santo Domingo, que el 2023 tuvo un retroceso de 1,73 metros, pero, que en este 2024 ya ha perdido 5,7 metros. También en la provincia de San Antonio, la playa de Algarrobo le sigue en el listado, con una pérdida de 4,83 metros durante este año, a diferencia de los 2,54 que retrocedió el 2023.
En la comuna de Valparaíso, la playa más afectada es la de Caleta Portales, que este 2024 ha retrocedido 1,77 metros; mientras que el año pasado lo hizo en 0,09 m/año. En la bahía de Concón se produce un fenómeno similar, con un retroceso de 1,63 metros este año, a diferencia de los 0,74 m/año que se perdieron el año pasado.
De regreso a la provincia de San Antonio, la bahía de Cartagena registra un retroceso de 1,5 metros por año durante este 2024, cifra que el 2023 llegaba a 0,70. En la comuna de Viña del Mar, la playa de Reñaca anota un retroceso de 1,21 metros por año este 2024, mientras que el año pasado se registraba una pérdida de 0,37 m/año.
La playa de Los Molles, ubicada en La Ligua, al norte de la Quinta Región, ha perdido 1,02 metros por año esta anualidad, mientras que el 2023 era de sólo 0,24 m/año.
Carolina Martínez, académica del Instituto de Geografía UC, explicó a Las Últimas Noticias que "tenemos una costa que se mueve por el contexto tectónico y por los terremotos de subducción que generan cambios verticales en las playas. Otro factor tiene que ver con los fenómenos de marejadas que son muy recurrentes, sobre todo desde el 2015 a la fecha. Ahora ocurren todo el año y muy altas".
Acerca de lo que ocurre en Viña del Mar, señaló que "la cuenca del Marga Marga también ha sido una de las más intervenidas, lo que produce un impacto inmediato en la morfología de la playa. Hay lugares que son estacionamientos en el verano y también hay ferias. Si fallan los aportes de sedimentos, impacta en la playa y retrocede. Los campos dunares también empiezan a ser inestables".
En tanto, Francisco Barriga, académico de la Universidad Andrés Bello, sede Viña del Mar, indicó al mismo medio que "el motivo principal está asociado a estos eventos que tenemos en invierno. Cuando hay lluvias y vientos, se producen erosiones en las playas. Es decir, el material arenoso es transportado hacia el mar. Y en verano ese material se deposita nuevamente en las playas".