Debo reconocer que en el último tiempo, más por una cuestión natural que por decisión propia, he ido caminando por senderos o caminos impensados algún tiempo atrás. Como una consecuencia lógica de los actos y los desafíos o compromisos asumidos he tenido la suerte de acceder a temas, herramientas o conocimientos interesantes de abordar y que a su vez es necesario tambien poder desarrollar y difundir.
En el marco de una Gira Tecnológica al sur del país para conocer experiencias aplicadas al sector turismo de energías renovables pude observar, con mucho agrado, como en condiciones muy adversas existen empresarios que deciden crecer o proyectarse de forma sustentable, armoniosa, con respeto por el entorno en lugares que muchos podríamos considerar como impensados debido a la lejanía o a los factores climáticos extremos.
Con anterioridad a esta misión tecnológica asumía como propio el concepto de Revolución Energética o Ambiental como forma de enfrentar los problemas actuales en cuanto a la generación y estrategias para enfrentar el sobreconsumo existente comenzando por la propia conducta respecto del como usamos (y abusamos) de nuestros recursos. No obstante de ello, en un taller al cual puede asistir en algun rincón de nuestro hermoso sur, le pude dar una vuelta a este termino al conocer otro, muy similar pero de gran diferencia, que me provoco e hizo mucho más sentido: Evolución Energética. ¿Cual sería la gran diferencia entre el uno o el otro? La Evolución Energética como tal se convierte en un concepto mucho más complejo, amplio y potente que es preciso poder analizar. De evolución se desprende mutar, cambiar, pasar de un estado a otro. Por tanto, Evolucionar Energéticamente, viene a ser un cambio en la conducta natural cotidiana entendiendo que cada cosa que hacemos implica un gasto, un consumo que podemos aminorar o disminuir y que impacta de una u otra forma, en mayor o menor medida, a nuestro ecosistema.
El consumo, de cualquier tipo, se fundamenta hoy en día, básicamente, en una economía que se mueve en base a los combustibles tradicionales que vienen a ser en su gran mayoría del tipo fosil. Que quiere decir esto que, como consumidores (todos lo somos nos guste o no), muchas veces no tenemos opción y queramos o no debemos ser parte del proceso de un bien o servicio que en su manufactura o producción ha incurrido en el uso de este tipo de combustibles. Un ejemplo es la energía electrica que en nuestro país, en un porcentaje, es alimentada en base a carbón natural. Al no tener elección y considerar que el servicio de la "Luz Electrica" es fundamental para nuestra vida diaria no podemos discriminar y decidir si la producción de esa energía comparte o no nuestros principios y si la queremos o no. No hay opción, la unica sería no usarla. Muchas veces jamas nos enteramos de como se produjo esa energía, cual fue su impacto y nos hacemos parte de forma indirecta, sin saberlo, de la responsabilidad implicita en su generación (positiva o negativa).
Por eso es que el tema de la Evolución Energética me causo mucho interes como concepto a tratar y a trabajar. Estimo que es un principio que a muchos nos debiera hacer sentido, que nos debiera interesar. Debemos ser capaces de entenderlo, pero mas que eso, hacerlo propio no por una cuestión impuesta o porque se pone de moda o porque el vecino lo hizo. Debemos ponerlo en práctica por la sencilla razón de que todos somos parte de los grandes problemas que enfrenta nuestro país y el mundo. A los problemas energéticos y a la sobrepoblacion mundial se suma la escasez de recursos no renovables y el desinteres e indolencia de muchos de nosotros en su uso y cuidado. Esto es precisamente lo que se debe cambiar. Evolucionar Energéticamente es provocar un alto en nuestras conductas cotidianas, domésticas y comenzar a entender que todos somos parte del problema y que tambien podemos ser parte de la solución.
Las energías renovables nos plantean grandes desafíos. Ciudadanía, Gobierno, Privados debemos ser capaces de potenciar nuestras tecnologías de producción limpia de manera transversal y ser un aporte constante y creciente en la cantidad de este tipo de generación e incorporarlo al sistema general (SIC). Debemos aprender a vivir eficientemente conciliando actitudes y conductas que nos permitan cuidar nuestros recursos y comprender que podemos ser un aporte.
Es un camino largo complejo, es cierto, y el gran problema es que no estamos acostumbrados. Pero es un camino que ya se comienza a andar. Que el optimismo jamas se extinga y que nuestra especie sea capaz de enteder y asimilar estos conceptos. Que no sea una Revolución sino una Evolución de nuestra cultura y respeto por nuestro hogar, por nuestro único planeta. R. de la O