Fuente: Depto Comunicaciones de FIMA
El conflicto por la aprobación que la COREMA de la Región del Maule dio para la construcción de la Termoeléctrica Los Robles -en el sector de Faro Carranza, al sur de Constitución- anota un nuevo hito.
El conflicto por la aprobación que la COREMA de la Región del Maule dio para la construcción de la Termoeléctrica Los Robles -en el sector de Faro Carranza, al sur de Constitución- anota un nuevo hito.
A través de Resolución del pasado 8 de julio de 2009, la Dirección Ejecutiva de CONAMA respondió a los cuestionamientos planteados por la Fiscalía del Medio Ambiente (FIMA) y otras organizaciones, en representación de los habitantes del sector, frente a las irregularidades presentes en la aprobación del proyecto de la multinacional Aes Gener.
Los efectos sobre la salud humana, los perjuicios que el proyecto podría provocar al medio ambiente y a la fauna de la zona y las dudas que existen sobre el proceso de cierre de esta planta de generación eléctrica a carbón, fueron algunos de los temas planteados por los abogados de FIMA en el Recurso de Reclamación presentado. La institución ambiental respondió punto a punto los cuestionamientos planteados, acogiéndolos parcialmente e integrando algunos cambios al proyecto Los Robles.
Uno de los puntos más polémicos es el proceso de cierre de Termoeléctrica Los Robles luego de sus 30 años de vida útil. En la Resolución de Calificación Ambiental con que la COREMA de la VII Región aprobó el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto Los Robles, sólo se indicaba que una vez llegado el momento Aes Gener evaluaría las condiciones ambientales y comerciales para decidir que hacer con su planta. Una posición que la ciudadanía consideró inmediatamente ambigua, poco clara y muy peligrosa.
Frente a ello, en la resolución dictada por la CONAMA el 8 de julio se precisó que Aes Gener deberá presentar a las autoridades, tres años antes del cierre de la planta, un plan de restauración y recuperación de las áreas impactadas por la termoeléctrica. Al respecto el presidente de FIMA, Fernando Dougnac, señaló: "es inaceptable que una planta termoeléctrica que va a afectar si o si el entorno de un lugar y con eventuales daños a la población, solo 3 años antes del cierre deban decidir y dar a conocer un plan de cierre". De esta forma la autoridad ambiental no entregó respuestas certeras ni soluciones concretas a las inquietudes de la ciudadanía, generando un tenso ambiente de incertidumbre respecto a lo que sucederá si el proyecto Los Robles llega a concretare.
Varios de los cuestionamientos planteados a CONAMA están relacionados con el impacto ambiental y en la salud de los habitantes de las comunas de Chanco y Constitución que tendrá el funcionamiento de la termoeléctrica. Al respecto en FIMA declaran que en el EIA de Los Robles no se menciona que población se encontrará bajo riesgo con la puesta en marcha de la planta, como se afectará la salud de esta población y cuales son las medidas de mitigación, reparación o compensación respecto al daño que se les podría provocar. En esta última resolución CONAMA identificó a algunas localidades que se verían afectadas por Los Robles, entre ellas Pellines y Chanco (ésta última no fue incluida en el proceso de participación ciudadana que por ley considera la elaboración del EIA), y aseguró que los niveles de contaminación se mantendrán bajo los niveles permitidos, evitando daños a la población, opinión que la ciudadanía no comparte.
En cuanto al tratamiento de los depósitos de cenizas (desechos producto de la generación eléctrica en base a carbón), tanto los abogados de FIMA como la ciudadanía han hecho ver en reiteradas ocasiones a la autoridad ambiental, sin obtener hasta el momento una respuesta satisfactoria, lo inconsistente de la propuesta presentada por Aes Gener: mientras se proyecta una vida útil de 30 años para la planta, la cancha de acopio de cenizas posee solamente 10, lo que se mantiene en la reciente resolución entregada por CONAMA.