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Recientemente nos toco participar en una reunión con profesionales del Gobierno Regional del Maule encargados del área técnica del proceso de estudio de Macrozonificación del Borde Costero. En él se detallan, de forma muy precisa, los distintos sectores y las actividades que confluyen. Esto ha sido un proceso largo y que una vez aprobado permite poder contar con un modelo indicativo base para las comunas relacionadas.
Es destacable la seriedad de este estudio, la integración de las comunas y comunidades que inciden en él, dándole un carácter de inclusividad necesario y vital para su desarrollo efectivo. En los próximos meses, observando que se efectúan las últimas correcciones, se debiera sancionar en la reunión de la Comisión de Uso del Borde Costero, aprobar y oficializar el documento.
Explotación de Roca en Faja Costera
En la oportunidad pudimos exponer un tema que es de suma preocupación y que seguimos hace más de un año (Junio 2009) a través de distintas denuncias ciudadanas responsables presentadas a través del Programa Vigilante Costero Maule Itata: La Extracción Indiscriminada de Roca en la faja costera. En su oportunidad hicimos el seguimiento y presentamos esta problemática a la Gobernación Marítima de Constitución presentándose formalmente el caso en el Juzgado de Chanco quedando claro que no existía autorización para esta explotación de roca (del tipo laja) y prohibiéndose dicha extracción.
En los últimos días. nuevamente, hemos sorprendido a particulares haciendo maniobras de extracción, de forma muy artesanal, en sectores de boca de ríos y playa. Esta actividad carece en forma absoluta de una regulación o tratamiento del mineral extraído y contribuye a la erosión de rocas en lugares donde su existencia tiene una gran importancia como elemento de contención natural de altas mareas. Además de comprobar el gran daño provocado con imágenes (de distinta data) existe una nula preocupación por los residuos dejados producto de la explotación desmedida.
En conclusión, podemos determinar, responsablemente, la falta de normas relativas a este tema, escasa fiscalización de los entes responsables y falta de participación de los municipios en este tipo de actividades entendiendo que muchos de los particulares que se dedican a este negocio no pagan permisos, patentes, ni impuestos en una zona que es un bien común y, por lo tanto, de interés de todos.
Al exponer este tema a los profesionales del área técnica de la CRUBC me aconsejaron presentar el tema de manera formal por lo que en los próximos días se enviara el oficio respectivo que permita normar de forma seria una actividad antes de que sea demasiado tarde. Esperamos esta vez poder frenar una erosión evitable y a todas luces imprudente e irresponsable.