Durante la última semana de
noviembre, del 25 al 28, se desarrolló en el Centro Cultural de Las Condes la
VII Versión del Festival Internacional de Surf, Ficsurf, 2014.
En un marco perfecto de gran
asistencia de público, donde antiguamente se producían grandes cantidades de
hortalizas, frutas y verduras en las chacras del sector y que, actualmente,
cobija al Centro Cultural de Las Condes, se exhibieron en competencia una serie
de películas documentales, cortos y largometrajes en un evento que se convierte
en un clásico de la ciudad de Santiago de Chile, reuniendo a lo más selecto del
surf nacional e invitando a que más personas conozcan como se ha ido
desarrollando este deporte en las distintas regiones del país y, se consolida, como una clara
oportunidad para influir positivamente en el desarrollo económico local con un enfoque sostenible y sustentable en el tiempo.
El Ficsurf se convierte en un
espacio para compartir y aprender del increíble deporte de las olas. Es una
oportunidad donde los organizadores hacen una invitación abierta para que más
personas puedan conocerlo y practicarlo en un espacio donde la Cultura y el
Surf se funden junto al respeto y cuidado por aquellos lugares donde se
practica y que, lamentablemente, en muchos casos se ven amenazados por
proyectos empresariales, inmobiliarias e industrias pasando por encima del licito interes de los residentes locales de poder incidir el tipo de desarrollo propuesto.
Uno de los puntos relevantes para
la organización del Ficsurf siempre ha sido la inclusión de organizaciones sociales con base en sus territorios y esta vez no fue la excepción. Seis
organizaciones independientes participaron: Puertecillo Playas Libres, Give Surf, Salvemos Quintero, Punta de Lobos por Siempre, Vigilante Costero y ValpoSurf Project. Todos compartieron información con los asistentes al evento
respecto de sus demandas, objetivos o estrategias de trabajo, bajo un mismo gran
objetivo, cual es evitar impactos que atenten con las formas tradicionales de
vida y que pueda afectar su entorno. Desde esa perspectiva, es importante otorgarle valor económico a la ola como, preservar los lugares para la hacer surf en el país y que la comunidad sienta propio el surf más allá de su practica.
“Es muy importante, junto con comunicar permanentemente cuáles son
nuestras acciones y objetivos como organizaciones, también poder
interrelacionarnos con otros amigos que pueden, o no, tener intereses u
objetivos similares. Aquí lo que trasciende es una comunidad que de manera
organizada decide informarse para poder tener una opinión y postura clara
respecto al desarrollo desmedido, o sin una participación equilibrada entre lo
que quiere el gobierno central o local y la ciudadanía que reside en aquellos
sectores”, comenta Rodrigo de la O, Director de Vigilante Costero ONG
quienes desarrollan su actividad de vigilancia en las costas del Maule y
Biobío, principalmente, en lo que se refiere a la contaminación de aguas por la
industria o tratamiento de aguas. “Este es
un espacio (Ficsurf) para empoderarnos,
conocernos y sensibilizarnos por esa realidad que viven muchas comunidades chilenas,
a lo largo del país, muchas veces
subyugadas y desplazadas por modelos de negocio extractivistas apoyados por el
estado que afectan directamente al medio ambiente, calidad de vida y salud de
las personas y que no tienen tribuna abierta. Es un honor para nosotros poder estar presentes, estamos muy agradecidos con los organizadores por habernos considerado una vez más y haber sido invitados”, concluye el Director de Vigilante Costero.
El Ficsurf 2014 llega a su fin y
el ganador fue el cortometraje “THE GIFT” de Eduardo Bartolomé, con 10 minutos
de duración que nos muestra como se desarrolla el surf en tierra patagona. .